Compartimos algunos datos del informe que realizamos en conjunto con la Iniciativa Mujer Rural y Derecho a la Tierra.
Para las mujeres en general y para las mujeres rurales en particular, la crisis provocada por la pandemia podría significar una regresión de más de una década de avances hechos por los gobiernos y las sociedades en el camino hacia la paridad en el ámbito laboral, económico y social.
La desigualdad económica de las mujeres campesinas que producen alimentos es mayor. Las mujeres rurales son el 43% de la mano de obra rural, además de las tareas de cuidado que realizan en sus comunidades y hogares, garantizan la seguridad alimentaria de la población.
Para fortalecer la Agenda 2030 es necesario superar estas inequidades. Es urgente y prioritario que los Estados y la sociedad en general, impulsen el cumplimiento de la meta 5.a